10 mandamientos para no meter la pata en Whatsapp
¿Cuántas veces has malinterpretado una frase, cuántos mensajes de media noche has enviado y de cuántos te has arrepentido, cuántas discusiones de pareja has tenido, cuánto tiempo has perdido y cuántos disgustos has sufrido vía Whatsapp? Tantos como los que te habrías ahorrado si sigues estas diez reglas de la mensajería instantánea.
1. No olvidarás que tu Smartphone tiene función “llamada de toda la vida”
Es el mandamiento número uno por dos razones: cuando una cosa es urgente tendemos a mandar mil mensajes insistiendo como locas, y cuando tenemos ganas de hablar, tendemos a mandar mil mensajes contando nuestra historia como locas. Mal, esos mensajes agobian y quizá la persona que los recibe no puede, no quiere o le es imposible atenderte, con la frustración que eso supone para ti al no recibir respuesta. Llama, más fácil, más rápido, más útil para expresar toda esa emoción y menos frustrante.
2. Evitarás los monosílabos
¿Cuántas veces te has enfadado o le has dado vueltas a la cabeza por un simple “ok” o “no”? Miles, seguro. Si mandas un mensaje entusiasmada con algo fenomenal que planteas al receptor y éste contesta con un “ok” piensas “¿será que no le entusiasma como a mí? ¿Qué no estamos en el mismo punto? ¿Qué no le apetece el plan?”. Y si ya es un “no” rotundo, tienes una noche en vela seguro. No te gusta que te lo hagan, así que no lo hagas tú.
3. Utilizarás emoticonos siempre que sea posible
Con “siempre que sea posible” nos referimos a que con temas de trabajo, mejor ahórratelos si no hay confianza. Pero, por lo demás, utilízalos siempre porque una cara sonriente, una lágrima y una flamenca a tiempo relajan cualquier mensaje y evitan malos entendidos. ¿O a caso es lo mismo un “todo bien” sin más que uno acompañado por el emoticono con las gafas de sol? ¿O un “esta noche salimos” a secas, que uno acompañado por la flamenca? No, en absoluto es lo mismo.
4. No escribirás absolutamente nada con una copa en la mano
Es un error seguro. Te desinhibes en todos los sentidos por lo que un mensaje inapropiado al chico de turno, un mensaje que por error envías a tu jefe, una decisión mal tomada que comunicas en ese mismo instante… Beber y chatear no, jamás, está prohibido.
5. Cuidarás tu foto de perfil
Se acabó la época Tuenti y con ella esa edad en la que tu foto de perfil de cualquier red social era de fiesta con una copa en la mano, con careto – por mucho que Cara Delevingne apueste por las muecas, en Whatsapp no funciona – de carnaval etc. La foto de perfil se ha convertido, más que en un simple reconocimiento, en una carta de presentación. Depende del trabajo que tengas, pero normalmente te tendrán como contacto personas que están por encima de ti o clientes que no querrán verte como Masiel. Pon una foto bonita, no tiene por qué ser seria, esto no es LinkedIn.
6. No tendrás como contacto a quien no te conviene
Este círculo de personas poco convenientes se reduce, básicamente, a los ex. Si antes en un día tonto o en una noche desenfrenada enviabas un SMS y para de contar, que uno tras otro sumaban una factura cuantiosa, ahora con Whatsapp eso se multiplica por mil. Es más fácil, más barato y más inmediato caer en la red de la nostalgia y volver a escribir a ese tío que en un día normal ni recuerdas. Evítalo a base de voluntad o borrando su contacto y punto.
7. No escribirás lo que no dirías en persona
Lo haces y lo sabes, te envalentonas por Whatsapp y sueltas lo que te apetece, sea bueno o malo, escudándote tras la barrera de la no personificación. Mal, ese tipo de mensajes desconciertan y, si son malos, llevan a discusiones innecesarias. Ten el decoro que tendrías en persona. Aunque, para todo hay excepciones, y decir algo bonito o atrevido, puede salirte más que bien.
8. No hablarás las cosas importantes
Es frío y produce malas interpretaciones. Las cosas importantes se hablan en persona, como mucho, si es una buena noticia puedes suscitar curiosidad con una frase misteriosa. Pero mejor en persona siempre, tanto si son cosas malas – la persona receptora de las mismas se lo merece – como si son cosas buenas, ¿te vas a perder su reacción?
9. No insistirás
Es algo muy habitual el pensar que como tú tienes tiempo en ese instante para hablar por Whatsapp, la persona a la que escribes también lo tiene. No tiene por qué ser así. Y recuerda que, salvo en días con mucho ajetreo, verá que tiene un mensaje sin leer, así que evita insistir más de la cuenta.
10. Entenderás que cada persona es un mundo
No todos somos iguales ni utilizamos Whatsapp para lo mismo. Así que, la máxima a la hora de utilizar esta App es ser tolerante y comprender que hay personas pesadas, aburridas, cortadas, cortantes, habladoras, calladas, sencillas y mete patas, como todos.