Hace ya unos años que el gran modista nos dejó, pero su memoria perdurará por siempre. En nuestra retina y en los libros de historia de la moda, por supuesto, también. Este 2018 es el centenario del nacimiento de Manuel Pertegaz, una de las grandes figuras de la industria de aquí, a la eternidad.
Manuel Pertegaz, aragonés afincado en la capital, hombre de sueños. Tanto los suyos propios, como todos los que ayudó a diseñar con cada una de sus líneas y creaciones. Lo suyo sí que era pura fantasía, ideales hechos realidad, formalizados en piezas únicas.
A nuestros oídos llego con el anuncio de un enlace real. Fue la reina Leticia la que confió en él para el diseño del vestido más importante de su vida con el que, por supuesto, conquistó a la crítica internacional. No nos extraña, las suyas han sido unas de las manos más importantes del mundo de la moda en España, sin duda alguna.
Fue entonces cuando, aún ya conociendo de antemano su trayectoria profesional, su burbuja se extendió alrededor de todo el mundo, su fama se volvió mundial. Tanto es así, que tras el fallecimiento de Christian Dior allá por el año 1957, ya se hablaba de él como el digno sucesor de su estilo. Impecable, nos queda claro.
Así, con el paso de los años, el mundo Pertegaz comenzó a crear ese aura de sofisticación, hasta que el afamado modisto nos dejó hace ya cuatro años. Fue una tremenda pérdida para la industria, que perdía a una de sus manos de oro, pero su estilo, como bien se suele decir, perdurará siempre.
Y, pecisamente con motivo de su nacimiento, del que este 2018 se cumplen cien años, Aragón le rinde un sentido homenaje a su figura. Con fiestas y actos en su memoria, pero especialmente inaugurando un Monumento conmemorativo, una placa y hasta una calle en la que su nombre figura bien ‘aliente’. Recordando, para el resto de los tiempos, la gran figura que Manuel fue.
