Las claves que definen el armario Victoriano futurista de Emma Stone como Bella Baxter, protagonista de esta delirante comedia de Yorgos Lanthimos acerca de una mujer con cerebro de ni&ntilde;a en un dist&oacute;pico siglo XIX.&nbsp;

Holly Waddington, la dise&ntilde;adora de vestuario de Poor Things (2023), <a href="https://www.nytimes.com/2024/01/02/movies/emma-stone-bella-baxter-costumes-poor-things.html">admite</a> haberse sentido avergonzada durante varias conversaciones sobre ropa con Yorgos Lanthimos, director de la cinta. Debido a la trama y la naturaleza de las tomas que ser&iacute;an filmadas, gran parte de las discusiones entre ambos giraban en torno al sexo: &iquest;C&oacute;mo se saca esta prenda determinada? &iquest;C&oacute;mo puede Bella Baxter, la protagonista, mantener relaciones sexuales utilizando este look?&nbsp;
Basada en la novela hom&oacute;nima de Alasdair Gray, Poor Things es tanto un filme de &eacute;poca como de ciencia ficci&oacute;n, en la que un cient&iacute;fico extravagante logra con &eacute;xito trasplantar el cerebro de un infante en el cuerpo de una mujer adulta. En un coming of age marcado por la liberaci&oacute;n tanto sexual como intelectual de los hombres que pretenden hacerse cargo de ella, el vestuario no s&oacute;lo deb&iacute;a adaptarse a los dist&oacute;picos escenarios en los que el personaje de Bella Baxter &ndash;interpretada por la ganadora del &Oacute;scar, Emma Stone&ndash; se encontraba, sino que adem&aacute;s deb&iacute;a ser reflejo de la evoluci&oacute;n que vive en su interior.&nbsp;

Al crear la indumentaria para este universo ficticio, Waddington descans&oacute; casi por completo en su propio instinto e intuici&oacute;n. M&aacute;s all&aacute; de <a href="https://mcid.mcah.columbia.edu/photographic-print/2023_photocoll_0449_0096">una obra de Egon Schiele </a>como referencia para su cabellera, no exist&iacute;an restricciones creativas por parte del director acerca de c&oacute;mo deb&iacute;a vestirse la gente en este dist&oacute;pico y fantasioso siglo XIX. "El &uacute;nico comentario realmente importante fue que no quer&iacute;a que pareciera abiertamente un drama de &eacute;poca, y no quer&iacute;a que fuera abiertamente como una pel&iacute;cula de ciencia ficci&oacute;n", dice.&nbsp;

Con experiencia en otros t&iacute;tulos como Lady Macbeth, con Florence Pugh, <a href="https://www.lofficielchile.com/fashion/huzzah-el-gran-vestuario-de-the-great">o la serie </a><a href="https://www.lofficielchile.com/fashion/huzzah-el-gran-vestuario-de-the-great">The Great</a><a href="https://www.lofficielchile.com/fashion/huzzah-el-gran-vestuario-de-the-great">,</a> Waddington recurri&oacute; a un set completamente distinto de herramientas en esta oportunidad. &ldquo;Cualquier cosa que incluyera encaje, perlas o bordados se sent&iacute;a incorrecto&rdquo;, se&ntilde;al&oacute;. En cambio, se bas&oacute; en las exageradas siluetas de la &eacute;poca Victoriana pero las radicaliz&oacute; mediante el uso de telas modernas, como pl&aacute;stico y latex. El efecto es anacr&oacute;nicamente desconcertante, acentuando ese matiz extra&ntilde;o y original de una hero&iacute;na&hellip; pues, desconcertante.

Al inicio de la cinta, Bella pareciera siempre estar en alg&uacute;n grado de desnudez o &ldquo;desvestimiento&rdquo;, como suele ocurrir con los ni&ntilde;os peque&ntilde;os. Prendas &iacute;ntimas se lucen a la intemperie, con atuendos infantilizados que Bella no eleg&iacute;a para s&iacute; misma. En cambio, en el segundo acto de la pel&iacute;cula, cuando viaja a Lisboa y conoce &ldquo;el mundo exterior&rdquo; que tanto anhelaba, cambia sus shorts de vuelos por unos amarillos de seda; m&aacute;s sensuales, m&aacute;s femeninos. Waddington pens&oacute; en <a href="https://www.pinterest.cl/pin/5066618327855293/">el ic&oacute;nico look de Jodie Foster en Taxi Driver </a>al dise&ntilde;ar c&oacute;mo quer&iacute;a que vistiera Bella para su primer paseo en solitario por la vida real. Para el vestido de novia, las mangas tipo globo alcanzan hasta un metro de di&aacute;metro, combinadas con un velo casi inexistente que rodea su rostro y se sujeta con un austero nudo en la nunca.&nbsp;

Al igual que la transformaci&oacute;n interna de la protagonista, el vestuario dise&ntilde;ado por Waddington va reinvent&aacute;ndose frente a nuestros ojos, cuadro por cuadro, segundo por segundo, de forma certera pero sutil. No es hasta quiz&aacute;s la &uacute;ltima escena, en que vemos a Bella como due&ntilde;a de casa estudiando para su examen de Medicina rodeada de todas sus amistades (y &uacute;ltimas creaciones), que su desarrollo se hace palpable, reconocible: su salvaje melena negra est&aacute; peinada, rostro despejado, y luce un sweater color crema elegante &ndash; aunque sin nunca sacrificar sus dram&aacute;ticas mangas infladas. Si no hab&iacute;a sido evidente antes, s&iacute; que lo es all&iacute;: la ni&ntilde;a se convirti&oacute; en mujer, con una personalidad, voz y estilo propios que, org&aacute;nicamente, se manifiestan en su cl&oacute;set.&nbsp;

En 'Poor Things', el paso a la adultez se lee en la ropa

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