Vestidor L’Officiel: sandalias romanas

Se acerca la llegada del verano y eso significa que empezaremos a dejar nuestros pies al descubierto. Reemplazaremos el calzado abrigado de invierno por las ligeras sandalias, ¿quieres saber cuál es su historia? En el vestidor de hoy te hablamos de los orígenes de las sandalias romanas.

Teniendo en cuenta que la sandalia es el calzado más antiguo de la historia, debemos retroceder hasta los mismos orígenes de la humanidad para dar con su creación. El primer par de sandalias hallado son unas egipcias, fabricadas en el año 10.000 a.C. Sin embargo, las romanas llegaron más tarde. En la Antigua Roma, los esclavos andaban descalzos y cuando en Grecia comenzaron a adaptar los zapatos para todo tipo de pie y actividad, la costumbre fue llevada hasta Roma. En ese momento el valor y significado del calzado evoluciona y se vuelve un símbolo de estatus y amuleto para la buena suerte.

A partir de la Edad Media, los zapatos dejan de tener un valor meramente funcional para obtener un valor estético. Así fue como las sandalias romanas pasaron a ser un elemento para resaltar virtudes o esconder posibles defectos de los pies. El punto de inflexión en la historia de este tipo de calzado tuvo lugar durante la Revolución Francesa. En el siglo XVIII, la aristocracia usaba zapato de tacón mayormente, pero se comenzó a buscar un zapato más cómodo. De esta manera, las sandalias volvieron a estar en auge, ya que se popularizaron las sandalias de tiras trenzadas como evolución a las romanas.

Así es como la sandalia, zapato por excelencia en la época romana y un básico todavía en nuestros armarios de verano, ha evolucionado. En sus inicios rústicas y funcionales, en la actualidad con múltiples colores, texturas y materiales. Sandalias, este verano nos volvemos a ver las caras y estamos encantadas.